IU Toledo instala su tradicional chiringuito en las fiestas del Polígono.
LOS ENCARGADOS DE ATENDERLO SON LOS PROPIOS MIEMBROS DE LA ORGANIZACIÓN
Es ya tradicional que Izquierda Unida instale su propio chiringuito en Toledo tanto en las fiestas del Barrio del Polígono como en las de Palomarejos. Se trata de un rincón de encuentro para militantes, simpatizantes y para todo aquel ciudadano que quiera pasar a probar sus ya famosos mojitos o alguna de las suculentas delicias que se hacen a la plancha En este sentido, mención bien especial merecen las conocidas “espatarradas” , que no son más que codornices abiertas y hechas vuelta tras vuelta, y que cualquiera podrá degustar al lado de la barra.
A buen seguro, los ciudadanos se preguntarán que hay detrás de este montaje ferial. Pues bien, ahí están los compañeros de la organización que ponen su trabajo y su tiempo de forma totalmente altruista para que eso salga adelante. Por ello, no se debe nadie extrañar de ver al coordinador local, Javi Mateo, cocinando los pinchos morunos o incluso al coordinador provincial, Alejandro Ávila, asando los populares chorizos con los que se prepararan montaditos. Si echamos un vistazo al conjunto de camareros dominan “los camiseta roja bajo el lema rebélate”. Ellos son militantes y miembros de los distintos órganos de IU local o incluso provincial que, para satisfacer la demanda y dar cobertura a las horas más álgidas de la fiesta, hacen esfuerzos por ser verdaderos profesionales de la hostelería, pero siempre llevando por delante sus reivindicaciones.
La ideología, como no puede ser de otra forma, está presente en la esencia del trabajo y de la fiesta en este pequeño rincón. Es evidente que los compañeros de Izquierda Unida quieren estar con su gente y buscar un lugar de encuentro con los ciudadanos. Pero ello no sin renunciar a sus principios, antes bien anteponiéndolos. Así, es habitual que la bandera republicana presida el quiosco, al igual que lo es que se exhiba alguna pancarta que ampare los lemas de las últimas movilizaciones.
Con la crisis, según relatan los compañeros de la IU las ventas han disminuido notablemente. Por tanto, los beneficios monetarios actuales dejan mucho que desear. “Está claro que si no fuera por el trabajo gratuito de la militancia esto sería un fracaso desde un punto de vista estrictamente económico” señala el coordinador local, Javi Mateo, quien añade que “el valor más importante, de lo que cariñosamente entre los compañeros denominamos chiringuitismo, es el poder estar en contacto con nuestra gente, intercambiar opiniones y también, cómo no, risas en estos espacios de ocio” .
Por otro lado, subrayar que esta práctica no es ni mucho menos exclusiva de la asamblea de IU de la capital toledana, sino que se instalan chiringuitos en muchas fiestas de distintas localidades de la provincia. En este sentido, merece la pena destacar por su magnitud debido a estar más enfocado para comidas, el de Talavera tanto para las fiestas de mayo como para las de septiembre. Otros, como el de Yeles son totalmente novedosos y evidencian la fuerza que IU está tomando en algunos municipios. Los hay también históricos como son el de la Villa de Don Fadrique, Mocejón, Seseña o Esquivias, por señalar sólo algunos. Pero, todos tienen el denominador común de poder encontrar allí a militantes o compañeros de IU que, de forma altruista y también desde detrás de una barra, luchan con una sonrisa por poder cambiar el mundo.
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