Izquierda Unida en la concentración reivindicativa de la residencia de mayores de Torrijos

Convocada por los sindicatos, exigen más medios humanos y técnicos para prestar un servicio de calidad

Responsables locales de la Izquierda Unida en Torrijos y cargos públicos de la formación, entre los que se encontraba el Diputado Provincial, Mario García, han participado en la movilización que organizada por los sindicatos UGT, CCOO, CSIF e Intersindical se ha llevado a cabo a las puertas de la residencia de mayores “Quijote y Sancho” para reclamar un cambio en las medidas aplicadas por la Delegación Provincial de Bienestar Social, que suponen, de manera arbitraria, la reducción de presencia profesional en los turnos de atención hacia los usuarios. Un hecho que está provocando una situación grave que dificulta la asistencia correcta y de calidad hacia los mayores.

Esta falta de personal, explican en Izquierda Unida, es seña de identidad del gobierno de Emiliano García-Page, que demuestra el abandono de la asistencia social en nuestra región, y que se une a la ya desesperante situación de la sanidad castellanomanchega.

“Una vez más, vemos como la falta de inversión en lo social es la tónica general del gobierno de Emiliano García-Page, que progresivamente se va dirigiendo hacia la reducción de los medios técnicos y humanos; acercándolo a aquellas políticas devastadoras que el PP puso en práctica cuando gobierno Castilla-La Mancha”, ha declarado Mario García, Diputado Provincial de Unidas Izquierda Unida Podemos.

Y es que, en el caso de la residencia de mayores “Quijote y Sancho” de Torrijos, se viene denunciando por el Comité de Empresa, la falta de personal desde hace mucho tiempo, cuando hace años se amortizaron plazas sin atender a criterios lógicos o de ocupación, así como otras denuncias relacionadas con las peculiaridades del centro en cuanto a infraestructuras, tales como ascensores, comedores y otras zonas comunes, que no han hecho otras cosa que aumentar la carga de trabajo para una plantilla cada vez más diezmada por los recortes de la Delegación Provincial de Bienestar Social.

Mario García: “Es dañino y contrario a la buena prestación del servicio, la reducción de medios que la Delegación Provincial de Bienestar Social está llevando a cabo, pero lo es más aún, cuando estos tijeretazos al derecho público de la dependencia, se hacen en medio de una pandemia que afecta de manera tan notable a las personas mayores, que tienen una especial condición de vulnerabilidad”.

Unas palabras que manifestaba el diputado provincial, que tienen que ver con la reducción de los turnos a mínimos, en cifras que según los sindicatos, están por debajo que en tiempos pre-pandemia.

Por último, Izquierda Unida ha agradecido a las trabajadoras y trabajadores de la residencia de mayores “Quijote y Sancho” de Torrijos, el inmenso esfuerzo que vienen desarrollando durante estos años de recortes y falta de implicación por parte de la JCCM para mejorar el servicio prestado a usuarios, así como las condiciones de trabajo de estas profesionales. Un tiempo, especialmente en pandemia, que han sido especialmente duro, cuando no contaban con material ni medios para preservar la salud en óptimas condiciones; de los usuarios como de ellas mismas.

“Que triste y que decepción para las trabajadores de lo social, que después de luchar tanto, y ponerse en riesgo por la falta de medios durante la pandemia, ahora la Consejería de Bienestar Social `las premie´ recortando plantilla e impidiendo que se pueda cumplir el convenio laboral en distintas formas”, lamentaba García, concluyendo: “Los mayores de nuestra tierra, y las profesionales de los social y de la sanidad, no se merecen este trato desconsiderado, injusto y lamentable que se les brinda desde un gobierno de Emiliano García-Page que está más pendiente de cuidar las gestiones privadas de residencias, que de atender la que directamente lo hace la administración pública. ¿No será que se está preparando el terreno para una próxima privatización del servicio en Torrijos?”, se preguntaba Mario García.